terça-feira, 4 de maio de 2010




íQué bueno sería se pudierámos dibujar un mundo nuestro donde pusiéramos todas las personas que nos gustan! En ese mundo no existiría el dolor, no existiría pérdidas, ni añorazas. Las distancias y las ocupaciones no serían capazes de alejar un del otro. Un mundo en que todos serian felizes.

Pero eso no es posible. No podemos hacer con que las personas que nos gustan dejen de sufrir.

Pero no somos títeres del destino. Tenemos el control de nuestra vida y podemos ser fuente de felicidad a los otros. Sí, no podemos cambiar el mundo, pero podemos hacer nuestro mundo mejor y más bonito. No podemos alejar el dolor de nosotros mismos ni de las otras personas, pero podemos estar juntos a ellas cuando necesitan. Podemos construir juntos una historia de vida que sea bonita a pesar de sus momentos tristes. Tenemos que hacer con que miramos nuestra vida y que, mismo viendo llanto, dolor y decepciones, veamos también superación, aprendizado, amistad y amor.

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